El sábado en la noche, por una necesidad social, fue necesario que asistiéramos, mi abnegada esposa y yo, a una reunión de parejas, a las cuales habíamos dejado de asistir a instancia mía, después de mi inexplicable despido.
Después de tanto tiempo de no asistir a ese tipo de reuniones ya me había acostumbrado a disfrutar de la comodidad de mi sillón acompañado de una buena lectura o alguna buena película, esto debido a que las televisoras se caracteriza por rellenar los horarios vespertinos y nocturnos del fin de semana con solo programación, para mi gusto, basura, que no te aporta algo que te pueda enriquecer la vida.
Pero en fin a mucha insistencia, poca resistencia y además buena cara; me puse a la tarea de elucubrar un plan o estrategia para evitar el aburrimiento y que la hora de retirada no se me hiciera tan lejana como el horizonte.
Ese tipo de reuniones, en si, me parecen monótonas, carentes de sentido y hasta aburridas, no es que sea un amargoso, lo que pasa es que prefiero que sea para festejar algo y no por el simple hecho de que “tenemos mucho de no juntarnos”.
Una vez instalados en la famosa reunión, y después de las clásicas frases motivacionales me instale en el lugar mas cómodo y propicio para llevar a cabo mi idea original de entretención, la cual seria analizar a cada uno de los presentes para intentar entender sus personalidades o formas de ser.
No voy a describir a todos y cada uno de los asistentes, pues seria largo e intrascendente, tratare de hacerlo solo de los mas y menos sobresalientes para que esto sea interesante.
Después de hacer la debida eliminación de los que considere que eran como yo, del montón, empezare por describir a los que, a mi gusto, sobresalían en la reunión.
El Triunfador
Después de tanto tiempo de no asistir a ese tipo de reuniones ya me había acostumbrado a disfrutar de la comodidad de mi sillón acompañado de una buena lectura o alguna buena película, esto debido a que las televisoras se caracteriza por rellenar los horarios vespertinos y nocturnos del fin de semana con solo programación, para mi gusto, basura, que no te aporta algo que te pueda enriquecer la vida.
Pero en fin a mucha insistencia, poca resistencia y además buena cara; me puse a la tarea de elucubrar un plan o estrategia para evitar el aburrimiento y que la hora de retirada no se me hiciera tan lejana como el horizonte.
Ese tipo de reuniones, en si, me parecen monótonas, carentes de sentido y hasta aburridas, no es que sea un amargoso, lo que pasa es que prefiero que sea para festejar algo y no por el simple hecho de que “tenemos mucho de no juntarnos”.
Una vez instalados en la famosa reunión, y después de las clásicas frases motivacionales me instale en el lugar mas cómodo y propicio para llevar a cabo mi idea original de entretención, la cual seria analizar a cada uno de los presentes para intentar entender sus personalidades o formas de ser.
No voy a describir a todos y cada uno de los asistentes, pues seria largo e intrascendente, tratare de hacerlo solo de los mas y menos sobresalientes para que esto sea interesante.
Después de hacer la debida eliminación de los que considere que eran como yo, del montón, empezare por describir a los que, a mi gusto, sobresalían en la reunión.
El Triunfador
Este personaje, tan especial en las reuniones, es el que se jacta de todo lo que ha realizado en su vida, enfatizando que lo ha hecho con el menor esfuerzo y gracias a sus habilidades para siempre ganar-ganar. Suele ostentar su vehiculo de modelo reciente aunque en realidad no utilice todos los artilugios que el modelo incluye, como el 4 x 4 si siempre anda en ciudad o la gran capacidad de pasajeros si tan solo son el y su esposa o dos pantallas de video si no las puede, ni debe, disfrutar cuando va manejando.
Describe todas las comodidades de su casa de campo y la ventaja de contar con un lugar a donde ir a descansar y le preguntas que cada cuando va y contesta que tiene mas de un año de no visitarla.
Describe su pantalla de LCD de 52 pulgadas que tiene en su recamara y cuando le preguntan sobre su serie favorita contesta que no es asiduo a la televisión.
El Sabelotodo
Esta persona es la clásica que cree saber de todos los temas, no hay algo que se comente en lo que él tenga la ultima frase y por lo regular a manera de epilogo, es decir ya no queda mas que comentar.
Cuando se topa con un tema que no domina inmediatamente lo asemeja con otro, que si es de su entero conocimiento, y toma el control de la plática.
Por lo general es el que tiene los argumentos para “exhibir” la jactancia del triunfador.
El Tragedias
Este tipo es una enciclopedia de todo lo malo que ha pasado, su platica se especializa en accidentes, incendios, robos, narcotráfico, desastres naturales y cosas por el estilo; cuando alguien intente robarle el tema es muy común que lo inmovilice con un: “yo conozco a alguien que tiene un amigo que le paso lo mismo pero peor”.
El Renovado
Esta persona se caracteriza por estar siempre ufanándose de los cambios que ha tenido en su vida, de como antes fumaba mucho y ahora solo fuma poco; que antes se la pasaba de bar en bar y ahora solo toma en su casa; que antes no se ejercitaba y ahora lo hace subiendo y bajando las escaleras de su casa; que antes tomaba refrescos y ahora solo coca Light, en fin, que es totalmente otro.
El Mañana Empiezo
A este amigo lo considero el clásico “inicia negocios” de bar, siempre trae excelentes oportunidades en puerta, las cuales, por lo general, son en sociedad con compañeros de parranda. Siempre trae, en la bolsa de la camisa, servilletas con anotaciones y números que avalan su comentario, describe las grandes ganancias por venir y es tanta su pasión al comentarlo que hasta te invita a formar parte del proyecto, el cual mañana lo inicia.
Hasta estos momentos, y desde hace mas de 15 años, sigue trabajando como auxiliar contable.
El Papa Cuervito
Esta persona se podría considerar que vive en un planeta de minusválidos y que solo vienen a la tierra de vez en cuando, su eterno comentario es sobre las excelentes y amplias habilidades que tiene este o aquel de su familia, su “perfecta salud”, sus “excelentes habilidades musicales”, “la altura de sus nietos”, “las habilidades deportivas”, en fin, es cansado oírlo y mas cuando enfatiza vocalmente estas virtudes.
El Ninguno
Este personaje lo deje al ultimo, tal vez por su característica que es tan especial, su apariencia física, delgada, bigote tupido y pelo rizado, mal vestido, tal vez hacen que pase desapercibido, es decir, que nadie lo “pele”.
No es capaz de intervenir en las pláticas, su vos, aguardentosa y monótona hace que cuando habla se suspendan todas las actividades para entenderle, tal vez por eso cuando lo intenta inmediatamente es interrumpido por alguien mas, como si no existiera.
Él siente que su función en la reunión es la de solo escuchar, él mismo se adjudica el puesto de Ninguno, tal vez porque es ninguneado.
Para explicarles mas detallado al respecto de este personaje tan singular les traigo un extracto del ensayo Mascaras Mexicanas de Octavio Paz.
“El ninguneo es una operación que consiste en hacer de Alguien, Ninguno. La nada de pronto se individualiza, se hace cuerpo y ojos, se hace Ninguno.
Ninguno es silencioso y tímido, resignado. Es sensible e inteligente. Sonríe siempre, Espera siempre. Y cada vez que quiere hablar, tropieza con un muro de silencio; si saluda encuentra una espalda glacial; si suplica, llora o grita, sus gestos y gritos se pierden en el vacío que don Nadie crea con su vozarrón.
Ninguno no se atreve a no ser: oscila, intenta una vez y otra vez ser Alguien. Al fin, entre vanos gestos, se pierde en el limbo de donde surgió.
Sería un error pensar que los demás le impiden existir. Simplemente disimulan su existencia, obran como si no existiera. Lo nulifican, lo anulan, lo ningunean. Es inútil que Ninguno hable, publique libros, pinte cuadros, se ponga de cabeza. Ninguno es la ausencia de nuestras miradas, la pausa de nuestra conversación, la reticencia de nuestro silencio. Es el nombre que olvidamos siempre por una extraña fatalidad. el eterno ausente, el invitado que no invitamos, el hueco que no llenamos. Es una omisión”.
