Es curioso, de jóvenes vivimos la vida con tanta celeridad y aun así sentimos como si el tiempo no pasara. Ahora de viejos, por mas que llevemos una vida calmada, sentimos que el tiempo se nos va mas rápido de lo que así deseamos. Será por la soledad?
Platicaba en días pasados con una persona a la que aprecio mucho y me contaba algo que le sucedió en relación a una de sus nietas que quiere bastante, aquí la historia:
"Mi nieta adolescente se preparaba para volver a su casa después de pasar sus vacaciones de verano con nosotros, con su presencia sentíamos la casa como con un permanente arcoiris. Al despedirse de nosotros le entregué 12 tarjetas postales pidiéndole: “Escríbeme unas líneas cada mes”.
Pasaron los meses, y las postales nunca llegaron, entonces decidí mandarle una carta:
Querida Jenny:
La vida se compone de una serie de etapas.
Cuando era niño, anhelaba ser adolescente, y esa etapa llegó.
Cuando era adolescente, ansiaba ser joven, y esa etapa llegó.
Cuando era joven, pensaba en conocer a una mujer, enamorarme y casarme, y esa etapa llegó.
Como hombre casado, anhelaba ser padre, y esa etapa llegó.
Como padre, me ilusionaba tener nietos guapos e inteligentes, y esa etapa llegó.
Como abuelo, esperaba el día en que mis nietos aprendieran a escribir, pero esa etapa aun no llega.
Te quiere tu abuelo.
Varios días después empecé a recibir las postales."