Es muy común escuchar a los hombres hacer comentarios referentes a la forma de manejar de las mujeres y muchos de ellos, por lo general, cargados de mordacidad o burla; pues bien, una manera de contestar a esos comentarios es informarles que la primera persona que estuvo al volante de un automóvil fue, precisamente, una mujer.
Esa mujer admirable fue Berta Benz, una tranquila y madura madre de cinco hijos.
Aquí su historia:
En 1871, Berta Ringer, que era su nombre de soltera, siendo novia del ingeniero Karl Benz, después de ver que éste iba de fracaso en fracaso en su proyecto de construir un vehiculo de motor para recorrer grandes distancias, decide invertir su dote en una sociedad con él. Mas tarde, en julio de 1872, agregarían otra sociedad entre ellos, se casarían para formar una familia.
Karl Benz se dedicó a diseñar y, posteriormente, a fabricar lo que sería el primer auto con motor de gasolina, que mas tarde llamaría Motorwagen; esto lo logró hasta 1885, pero en esa fecha nadie tenía fe en su invento y sus críticos, que eran muchos, afirmaban que no tendría aplicación práctica, solo una persona, además de él creía lo contrario, y esta era su esposa Berta.
Y fue en un amanecer de los inicios de agosto de 1888, cuando la audaz Berta, cansada de la falta de confianza en el proyecto, reunió a sus dos hijos mayores, los instalo en la creación de su marido y, mientras Karl aun dormía, emprendió un viaje histórico de Mannheim, donde vivían, hasta Pforzheim, a 100 montañosos kilómetros de distancia.
Fue un viaje difícil y lleno de aventuras. El pequeño motor solo desarrollaba 1.5 h. p. Cuando querían subir una cuesta tenían que bajarse y empujar. Si iban cuesta abajo, las zapatas de freno, hechas de cuero, se gastaban muy pronto. Se tuvo que recurrir a los zapateros en los pueblos del camino para cambiarlas por otras nuevas.
Cuando el mecanismo de encendido se descompuso, Berta utilizo una de sus ligas para repararla. Para destapar un conducto obstruido en una válvula, se las arreglo con un pasador de pelo. Y para conseguir ligroína, el combustible que utilizaba el vehiculo, fue necesario que visitara varias tiendas de químicos. Pero el valeroso trío después de un arduo día, logro su propósito; al día siguiente hacían el viaje de regreso.
Cabe mencionar que la reseña de este histórico viaje recibió una gran publicidad, algo que Berta siempre había buscado; además, esto le sirvió a Karl para hacerle varias mejoras a la unidad.
Esta es la historia de como Berta Benz se convirtió en la primer persona en realizar un viaje largo en un vehiculo de motor y demostrar, de esa manera, que el vehiculo de Karl Benz podía transportar personas a grandes distancias.