Conversar con otra persona (amigo, pareja, compañero, vecino, familia) es de las cosas mas agradables que se pueden hacer sin que nos pueda costar dinero; lo único que hay que invertir es tiempo.
No siente usted que, en mayor o menor medida, el arte de la conversación está muriendo? Con tantos medios de comunicación actuales, el conversar con alguien en “vivo y a todo color” pasa a ser un caso excepcional.
No obstante, en cualquier caso, este sigue siendo una habilidad decisiva, puesto que realmente no existe otra forma de comunicarse con la mente de otro ser humano; solo hablando se entiende la gente.
No se habla de la clásica salida al café porque quiero que me “oigas”, no, estamos hablando de estar con otra persona manteniendo una conversación interactiva, aunque sea para quejarse de la situación actual.
La buena conversación, como cualquier otra destreza requiere de práctica. Conocemos la discusión acalorada, o la persona que con sus chistes se gana a los comensales, y al experto de diserta sobre su especialidad; pero nada de esto es conversar.
La replica y la contrarréplica, el sutil giro de una frase, el ritmo y, sobre todo, el toma y daca inteligente, perceptivo, de autentica buena conversación pérsica de gente ingeniosa que juega al tenis verbal.
El practicar la conversación con otra/as persona/s suele desarrollar múltiples maneras de expresarse, pues, aun y cuando esta sea por teléfono, siempre se estará pensando en como transmitir tu idea a la otra persona.
Bien se puede resumir que como entretenimiento, la conversación, supera con creces a la televisión y al Internet.
