entre el optimista y el pesimista 
descansa en el concepto de la memoria. 
El pesimista recuerda con toda claridad 
los daños y fracasos del ayer, 
mas no puede evocar 
las abundantes posibilidades 
de un mañana nuevo.
En cambio, 
el optimista ya tiene grabado en la memoria 
un futuro lleno de esperanza.
Charles Jinks

