Hay un dicho que dice “En el pedir, esta el dar”, esto es muy aplicable para cuando se desea pedir algo que deseamos y que no queremos que nos contesten con un rotundo “no”.
Para eso es importante que hagamos saber lo que queremos, sin dar impresiones falsas, sin hacer exigencias no negociables (a menos, claro esta, que el caso lo amerite); asimismo, dejar bien claro que es lo que deseamos:
-Qué es.
-Cómo.
-Cuánto.
-Cuándo.
Claro está, tomando en cuenta las necesidades y deseos de la otra persona.
Los siguientes son ejemplos de cómo se deben pedir las cosas para minimizar el riesgo de que sean rechazadas:
“Me gustaría muchísimo que la próxima vez me dejaras elegir la película”.
“Necesito comentar contigo algo importante, pero puede esperar hasta el lunes..”
“Deseo que vayas a dejar estos paquetes antes de irte a tu casa, ¿estas de acuerdo?”.
“Me encantaría quedarme mas tiempo en la fiesta, y a ti ¿te gustaría?”
“No quiero que pasen mas días sin aclarar cual es tu función en el trabajo; hoy a las 5 de la tarde, lo definiremos conjuntamente”.
Como estas hay mas formas de pedir algo y no ser rechazado en el intento, el secreto está en la afabilidad con que se plantee la solicitud.
En resumen: Haz tus peticiones sin mandar.