Decía la Madre Teresa cuando le preguntaban cuanto es suficiente cuando de dar se trata “hay que dar hasta que duela”.
Mucha gente esta acostumbrada a dar lo que le sobra, lo que no necesita o lo que ya no le es de utilidad, ese concepto tienen de dar para ayudar; con esto sienten cumplir con su conciencia y obligación moral ante la sociedad, inclusive hay algunos que lo hacen publico e invitan hasta los medios para que la gente se entere que ellos son muy humanos, mas que los demas.
El quitarse el pan de la boca cuando se tiene hambre, el despojarse de un abrigo cuando se tiene frío, el permanecer en vela cuando se tiene ganas de dormir, el dar las ultimas monedas en tu bolsillo, todo esto en bien del prójimo es lo que bien se podría considerar como el verdadero dar.