En los concursos de television, cuando un concursante puede elegir premio, es rarísimo que no se decida por un auto. Es una idea fija. Y es que para una inmensa mayoría de la gente, el automovil se ha vuelto imprescindible, tanto que parece formar parte de su propio cuerpo, al igual que los centauros, mitad caballo y mitad hombre.
El hombre se va haciendo -si no se ha hecho ya- esclavo del automovil. Que donde lo estaciono, que le falta aceite, que hay que engrasarlo. que casi no trae gasolina, que le falta seguro y mil cosas mas que agobian y angustian al usuario.
Tenia razón el humorista Forgues en un chiste que comento que incluía un buen mensaje:
Dos personas comentaban varados ante un fondo abrumador de coches y mas coches:-El poder tener coche es signo de nivel de vida- dice uno.Y el otro contesta:-Pero el poder comprárselo y no tenerlo, eso es "calidad de vida".